La precariedad de los servicios públicos servidos por las empresas privadas es una realidad tangible que además es tolerada por la mayoría de instituciones públicas de distinto nivel. Los cortes de electricidad que estamos últimamente sufriendo en Alosno no son más que la punta del iceberg del mangoneo y chantaje que estas empresas hacen al ciudadano bajo la no intervención de las dos fuerzas políticas dominantes.
Lo más bochornoso es que casi todas estas empresas que realizan servicios públicos fueron antes íntegramente públicas:
- ENDESA: privatizada por la mitad de su valor real en la década de los 90 por el Partido Popular. Ahora mismo cuenta como uno de sus asesores a José Mª Aznar.
- TELEFÓNICA: privatizada por una quinta parte de su valor real. Esta privatización fue auspiciada por Rodrigo Rato. Primero privatizó SINTEL (filiar de telefónica), luego le tocó a la empresa matriz. Este lumbreras de los negocios luego se fue de director al Fondo Monetario Internacional (en su gestión comenzó la crisis económica mundial) y luego remató la faena al hacerse cargo de BANKIA (preferentes, burbuja inmobiliaria…). Por los favores creados actualmente es asesor del Banco Santander.
- REPSOL: cuando CAMPSA era la empresa estatal pública de los hidrocarburos, el gobierno socialista de Felipe González creó REPSOL para competir en el extranjero. Una vez privatizada terminó comprando de manera simbólica a la empresa matriz.
Muchas más empresas hay con el mismo pasado y presente que las citadas anteriormente. Bajo el engaño de que eran una carga para el estado se privatizaron todos las empresas públicas que eran rentables dejando a cargo del estado, de todos nosotros, las deficitarias que se mantenían con los beneficios de las rentables.
Después de esta breve introducción para dejar claro en el contexto en el que nos movemos nos centraremos en el problema que ahora nos ocupa que es ENDESA.
Los continuos microcortes que estamos sufriendo en el municipio son tan leves que no quedan reflejados, eso provoca que cualquier reclamación por deficiencias en el servicio o averías de aparatos eléctricos queden invalidadas, incluso si es colectiva. La única opción eficaz es interponer una demanda colectiva donde el peso de muchas voces sean prueba ante un juez.
Anteriormente la ley daba un margen a los usuarios para enfrentarse a las grandes compañías ya que si al final el juez decidía en tu favor, la empresa pagaba los costes del proceso y lo reclamado. Ahora, después de la reforma del Partido Popular, el usuario debe pagar los costes del juicio que luego se le remunerará si tiene razón. Esto deja a la persona sola e indefensa ante las grandes compañías.
Para solucionar el tema de manera eficaz los pasos serían los siguientes:
- Recogida de firmas en una iniciativa popular.
- Esta iniciativa debe recoger la voluntad de demandar a ENDESA por perjuicios y servicios defectuosos.
- Entregarlas en el registro del Ayuntamiento para que sea el ente el que en nombre de los firmantes sea quién demanda.
- Que el Ayuntamiento inicie una demanda contra ENDESA igual que otros tres en la provincia de Huelva.
Solo la presión popular puede forzar la justicia, pero en un país donde el Gobierno de derechas que tenemos intenta criminalizar cualquier protesta y amilanar al ciudadano frente a las grandes empresas, solo presionando a los políticos directos (alcalde y concejales) podemos combatir en su terreno.